viernes, 25 de marzo de 2011

LONDON CALLING


Antes de nada, decir que titulo este post de esta manera, pues desde que tenía 17 años que no hace mucho de ello, me quedé prendado con un tema de The Clash titulado “London Calling” y es desde ese momento cuando entré en deseos de ir a Londres.

Londres, que decir de Londres, fantástica ciudad, que rompió con todos los mitos y dudas que me acechaban, que si se come mal, que si llueve mucho, que si la gente es estúpida, etc, etc,….nada de nada, un viaje fantástico desde que pisamos suelo en Gatwick hasta que regresamos.

Para empezar, nos esperaba un amable conductor en el aeropuerto con un cartelito muy bien trabajado, del tipo de carteles que llevan los que piden dinero en los semáforos en Murcia, pero que en este caso ponía mi nombre y apellidos, como era de esperar el muchacho no hablaba ni papa de español, ¿para qué? Si el idioma universal es el inglés, pues eso, que ”Hello” y poco mas, en cuanto el macho alfa de la manada empezó a soltar su alegre verborrea en spanglish a nosotros nos dio la risa y allí acabo todo intento de conversación con el conductor. Para situarnos diremos que éramos cuatro dos machos y dos hembras, con un nivel de inglés elevado si nos situamos en Torreagüera, pero muy bajo si nos situamos en Chelsea.

Llegados al hotel la alegría nos invadió, pues justo debajo del cartel de recepción se podía leer perfectamente “Hola. Bienvenidos”, coño, hablaban español, no en vano era un hotel de la cadena NH y nos hizo sentir como en casa, todo muy apañado y muy limpio, hotel situado en el barrio de Kesyntong de mucho lujo y muy coqueto.

Una vez situados procedimos inmediatamente a mimetizarnos con la sociedad londinense y que mejor sitio para dicha tarea que acudir a un pub y pedir unas pintas, pues nada que durante los cuatro días que estuvimos en London procedimos a tal operación al menos una vez al mediodía y otra a la noche, no hay nada como integrarse con la población autóctona y apoderarse de sus costumbres.

¿Qué ver en Londres?, joder demasiadas cosas tiene Londres, nosotros nos decantamos por La Torre de Londres y su tesoro, el puente de La Torre que esta justito al lado, el Borought Market, un mercado muy curioso en el que puedes comer cositas que cocinan allí mismo y del que guardo buen recuerdo de un bocadillo de pato con mostaza que estaba de vicio, el Museo de Historia Natural, la entrada es acojonante con un gran esqueleto de dinosaurio, vimos también el British Museo, bueno, una parte minúscula de él, pues es muy, pero que muy grande, vimos el Big-Ben y su entorno donde también esta Abadía de Westminster y visitamos el cambio de guardia en el palacio de Bukingham, esto merece mención aparte.

El cambio de Guardia, vaya vaya, VAYA mierda, lo mejor son una fotos que hizo el Jose Maria (macho alfa) las cuales por desgracia aun no tengo y que espero que a lo largo de esta década las pueda obtener, en donde se aprecian unas maravillosas calvas y cogotes que es todo lo que atine a ver. Aviso, si vais a Londres suprimir esta visita.

Otro lugar muy típico de Londres es Harrods y su tienda de bolsas de plástico, macho, es de cajón, si vas a Londres compras una bolsa de Harrods o te mueres.

Harrods pretende ser unos grandes almacenes como el Corte Inglés, pero para gente de posibles, exceptuando la sección de bolsas de Harrods y recuerdos de Harrods, todo lo demás mires por donde mires el precio mínimo tiene tres cifras, nosotros, turistas de alto standing, no adquirimos ningunas sabanas de Armani ni bolso de Gucci, pues teníamos un espacio muy limitados en las maletas y con las previsiones que teníamos de comprar unos trajecitos algo dispares, que era la verdadera prioridad de nuestro viaje a Londres, no nos arriesgamos a que por falta de espacio tuviéramos que pagar un sobrepeso en nuestro Airbus 380 de la compañía easy yet.

El caso es que en Harrods yo personalmente no vi mucha gente comprando, vamos que no vi gente comprando, eso sí, cuando aparece algún milloneti lo mismo hacen la venta de la semana o del mes.

Pasemos al asunto de las comidas, tenía el miedo metido en el cuerpo, yo gran gourmet de todo lo que se mueva o crezca me veía comiendo pizza y perritos calientes, me habían acojonado, pero claro yo soy un caso aparte y me puse a buscar información y equiricua, Londres es la ciudad de la cocina internacional, que maravilla, comimos en un Hindú cosas realmente exquisitas, probamos el pollo laqueado en un chino, entramos en un taiwanes y comimos cosas que no sabría describir y como no, en los pubs pudimos degustar con mucho acierto el fish and chips ( buenísimo) y el Shepherd's Pie (Pastel del Pastor), un pastel típico ingles de carne de cordero molida con puré de patatas, este tipo de pastel tiene muchas variantes y casi todas comestibles.

El viaje iba finalizando y se acercaba el momento cumbre de nuestra estancia en Londres.

El sábado antes de visitar portobello y su mercado teníamos la más importante cita de nuestro viaje, teníamos que coger el metro y viajar hasta Northolt. Allí se ubica una tienda Llamada Jedi Robe, tienda que esta exclusivamente dedicada a vender mercaderías varias relacionadas con Star wars, si tío, con dos cojones, nos fuimos a Londres para comprarnos unos trajes de star wars ya que teníamos a la vista una fiesta monotemática dedicada a la trilogía y era menester hacer acopio de material para dicha fiesta.

En fin que cogimos el metro y allí nos plantamos, cuatro murcianicos por el mundo entrando en la tienda de Jedi-Robe, el dependiente quedo gratamente sorprendido al ver a cuatro turistas entrando en su tienda y pensando, a estos los clavo vivos.

Después de unos pequeños problemas de comunicación, salimos feriados y con una risa en nuestro rostros, habíamos adquiridos lo siguiente: Sandra un traje de princesa Leia, Trini otro de Leia pero más de fiesta, yo adquirí el de Bobba Fett, el cazarecompensas y el amigo Jose Maria se bastó con una réplica de la túnica de Jedi Robe y una espada laser. Luego para terminar la visita nos hicimos unas fotos y nos fuimos con nuestra música a otra parte.

En fin, un viaje muy interesante y sobre todo con muy buena compañía.

3 comentarios:

  1. ver disfrutar a un amigo, es otra manera de disfutar tambien. Bonitas fotos, me hago una idea.
    saludos

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  2. Estimado Darío me ha encantado la frescura de tu relato y la naturalidad y simpatía de tus descripciones.
    Anímate, por favor, y escríbenos más.
    Un saludo
    Pepe

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  3. Muy acertado y ameno tu relato, casi he revivido el viaje. Sólo hay una cosa errónea, en mi casa no hay ningún macho alfa, de hecho el macho es el último de la manada por detrás de la hembra alfa, las niñas, las perras y el mobiliario delicado.
    Meseguer.
    Lo de anónimo es mentira, es que no consigo poner mi nombre porque no tengo ni idea de lo que es URL

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